Dallas, TX.- Con el triunfo de Trump, ese permanente experimento de democracia, libertad e igualdad, que es Estados Unidos, se convertirá en los próximos 4 años en un laboratorio, donde México fue el eje central del debate presidencial visto como un problema para Estados Unidos. Contrario a los discursos y a la estrategia defensiva y contención aparente del Gobierno Mexicano ante el ascenso de Trump; en los hechos, la Presidencia de la República apostó por el Republicano, así lo reveló el ex embajador de México ante Estados Unidos Miguel Basáñez en un foro “Mexico- EU peligros de la coyuntura” organizado por el Colegio de México, afirmó que una porción del salinismo, manlismo y peñismo veían con escozor la posibilidad que la demócrata Hillary Clinton arribara a la Casa Blanca, la cual publicó el Periódico Reforma, sin que trascendiera en la opinión pública el pasado 18 de octubre.
Basañez refirió que la animadversión del PRI hacia Hillary se remonta a una declaración de la demócrata: “Sobre mi cadáver”, que se le atribuye a la Ex secretaria cuando se le pidió su opinión sobre el PRI. En ese sentido el Republicano Donald Trump resulta una cara más amable para esos segmentos y puntualizó “Hay una alineación de objetivos perversos y mezquinos , hacia la simpatía a Trump, la cual aclaró no la percibió cuando estaba en la administración, pero después con su remoción como Embajador y el nombramiento de 35 cónsules y con la polémica invitación a México de Trump, todo parecía irse configurando en esa alineación”, puntualizó el ex diplomático.
La realidad confirma las declaraciones de Basañez, con base en estas evidencias:
1.- Existió opacidad puesto que de las 15 solicitudes de información a seis dependencias federales sobre la visita de Trump: Secretaria de Gobernación (SEGOB), Instituto Nacional de Migración (INM), Secretaria de Relaciones Exteriores (SRE), Secretaria de Hacienda y Crédito Público (SHCP), y Secretaria de la Defensa Nacional (SEDENA), respondieron que había inexistencia de información sobre el costo del traslado, la seguridad, documentos migratorios respecto a la entrada de Trump a México.
2.- Fue la Presidencia de la República la que respondió a la solicitud de información con folio 0210000128316, refiriendo que el Estado Mayor Presidencial costeó el traslado el 31 de agosto, el servicio de transporte aéreo (helicóptero) para que Trump fuera trasladado del aeropuerto (hangar presidencial) a los Pinos y de regreso, lo que se interpreto como una ayuda del Gobierno mexicano a la candidatura de Trump.
3.- El resultado. La visita Trump a los Pinos, posicionó a Trump como presidenciable ante la negativa de Hillary de entrevistarse con Enrique Peña Nieto; Trump la acusó de rehuir afrontar el problema; posicionándolo electoralmente.
A 240 años de democracia en Estados Unidos, nación fundada en 1776, cuya declaratoria de Independencia nació bajo el principio de que “todos los hombres son creados iguales”, voto a favor de la nostalgia de “Hacer otra vez grande a EU”, y llevó por vez primera en la historia a un empresario no político como el inquilino XLV (45) a la Casa Blanca, con un discurso nacionalista y proteccionista gracias al hartazgo social del electorado que ocho años atrás llevo a Obama –primer afroamericano- a la Casa Blanca y que defraudado le retira la confianza al “establishment” establecido de la clase dirigente con un justo reclamo al desarrollo.
Al gobierno mexicano le tocara negociar con EU que necesita de nuestros recursos y nuestro mercado es estratégico para ellos y que un desastre al sur de su frontera afectaría la estabilidad política y económica de Norteamérica. Al tiempo.
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